Hôtel La Maison Des Armateurs

Colocando la elegancia de una casa armadora en el centro de su concepto, el hotel La Maison des Armateurs lo sumerge en un universo cálido, acogedor y cómodo.

Pensado como un verdadero refugio de serenidad, el establecimiento se enorgullece de ofrecer a sus huéspedes una experiencia auténtica, donde el sentido de la hospitalidad y la atención al detalle marcan la diferencia.

Ya sea que busque una escapada romántica, una aventura en familia o un viaje de negocios, nuestro equipo está a su disposición para hacer que su estancia sea inolvidable.

Esta casa se eleva en 6 pisos, con habitaciones cómodas para una escapada en pareja o más espaciosas para familias. Cada detalle ha sido cuidadosamente pensado.

Su ubicación geográfica le permitirá acceder fácilmente a las murallas de Saint-Malo, la playa del Sillon para admirar las grandes mareas, el Casino, restaurantes y tiendas.

El lema de Saint-Malo: "Ni francés, ni bretón, Malouin Soy

El propio edificio tiene una historia que se remonta al menos al siglo XIV, lo que le otorga un encanto especial y un vínculo profundo con la historia de Saint-Malo.

A lo largo de los años, ha sufrido varias transformaciones, incluida una elevación en 1922, antes de convertirse en apartamentos en 1953, y luego en el hotel que conocemos hoy.

El nombre actual del hotel rinde homenaje a la historia marítima de Saint-Malo y a la importancia de los armadores en el desarrollo de la ciudad.

Propietarios y comerciantes de barcos durante siglos, figuras como Jacques Cartier, Duguay-Trouin, Surcouf y Chateaubriand hicieron de Saint-Malo un puerto clave para el comercio internacional.

Pasar una noche en los pisos superiores de La Maison des Armateurs es vivir una experiencia única en el corazón de la ciudad fortificada.

Es acercarse al misterio, descubrir los secretos de una historia inmensamente rica, la historia de la conquista de un nuevo mundo.

Aquí, Saint-Malo te abre su corazón.

¡Conviértete en un Armador y zarpemos juntos en esta aventura!

Los carruseles giran en todas las ferias de Francia, pero la atracción magnética de la Ciudad Corsaria es tan fuerte que, en 1983, se establece la primera gofrería permanente en el número 11 de la Rue Porcon de la Barbinais, en el corazón de la ciudad fortificada.

Al año siguiente, nuestro padre cruzó las puertas del Lion d’Or, que se convertiría en una brasserie especializada en carnes.

En 2005, los hermanos Hector cruzaron la plaza y tomaron las riendas del Café de l’Ouest, donde "el mar sería el protagonista".

En 2010, se sumó La Licorne, una magnífica crêperie frente al castillo.

En 2015, nació The Bakery, frente a la Porte Saint-Vincent, ampliando así el saber hacer de la familia al preparar pastelería y bollería artesanal para abastecer nuestras tres brasseries y nuestro hotel.

Finalmente, en 2024, decidimos sumar a nuestra colección nuestro primer hotel: La Maison des Armateurs.

Más que un hotel, esta casa es un hogar familiar, que te recibe… para comer y beber.